Ayer por la tarde la Curva Est, el lugar donde se reunian los ultras de la Ternana en el estadio Libero Liberati, volvió a llenarse de seguidores: pero esta vez no era por un partido de fútbol oficial, si no con motivo de solidaridad y de fiesta: el adios al fútbol profesional de Riccardo Zampagna. Los que colorearon el estadio con banderas y pancartas, sin embargo, no eran sólo los seguidores de la "Fere", también hubo muchisimos seguidores del Atalanta que ayudaron a conseguir una buena entrada en el estadio que no pronosticaban las predicciones meteorológicas.
La Curva Est ayer era un verdadero centro de agregación, también gracias al Dj Set y al bar, gestionado por el Rolando Café Terni que, posicionado directamente en el primer anillo, el sector más bajo de la curva, ha estado repleto durante todo el partido. Todo se desarrolló en calma y armonia, salvo cuando saltó al terreno de juego Marco Di Loreto, silbado por todo el estadio por haber militado en el pasado en las filas del Perugia, los odiados vecinos. Muchisimos aplausos, sin embargo, para Igor Protti, ex-bomber del equipo, que hoy se ha alza en bandera para los seguidores del Livorno, y también para Domenico Giampá, centrocampista que actualmente milita en el Modena.
FUENTE: Tuttoggi
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