jueves, 12 de marzo de 2009

Con la excusa del racismo, más represión...esta vez para los catalanes


El conseller de Interior, Joan Saura, ha propuesto hoy impulsar una nueva Ley del Deporte en Cataluña para que la Generalitat pueda aplicar el régimen sancionador previsto por la legislación española para combatir el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
En una comparecencia en el Parlament, Saura ha anunciado que su consellería y la Secretaria General del Deporte están impulsando una modificación del decreto que regula la Comisión contra la Violencia en el deporte para poder aplicar estas sanciones de forma transitoria mientras no se aprueba esta nueva normativa.
En concreto, según Saura, se tendría que crear una subcomisión dentro de la Comisión contra la Violencia en Espectáculos Deportivos de Cataluña, que se reuniría una vez al mes y se encargaría de analizar de forma detallada todos los casos de violencia, racismo, xenofobia y de intolerancia en el mundo del deporte, para poder aplicar las sanciones previstas en la Ley del Deporte vigente en toda España.
El departamento de Interior se ha planteado esta reforma legislativa ya que la Ley del Deporte española, aprobada en 2007, es mucho más detallada y completa que la catalana, aprobada en 2002, ya que recoge con mayor precisión el combate contra el racismo y la xenofobia en el deporte.
La pretensión de Interior de aplicar estos cambios legislativos coincide con los últimos incidentes registrados en Cataluña en materia deportiva, como por ejemplo la brutal agresión racista en un partido de tercera división, en enero pasado, cuando los jugadores del Bada Bing la emprendieron a golpes contra los del Rosario Central, lo que se saldó con cinco detenidos y varios heridos.
Lo que ocurre ahora es que, al ser más amplia la ley española que la catalana, la Generalitat tan sólo puede proponer la imposición de sanciones en este tipo de incidentes, situación que Interior quiere cambiar con una nueva ley catalana para poder ejercer plenamente las competencias sancionadoras y luchar así con mayor fuerza contra la violencia deportiva y el racismo y la xenofobia en los recintos deportivos.
Según Saura, la nueva ley recogería las facultades que los artículos 134 y 164 del Estatut otorgan a la Generalitat en materia deportiva, ya que se reconoce su plena capacidad sancionadora.
La actual legislación española prevé sanciones de entre 150 euros, por infracciones leves, hasta los 650.000 euros, por las más graves, así como la posibilidad de cerrar temporalmente un estadio o prohibir a un aficionado entrar a un recinto deportivo durante cinco años.
La subcomisión que quiere crear ahora el departamento de Interior estaría integrada según Saura por representantes de esta consellería, de la secretaría de deportes, de los Mosso d'Esquadra, de las federaciones catalanas de fútbol y baloncesto y por la Unión de Federaciones Deportivas de Cataluña.
Esta subcomisión podría declarar qué partidos son de alto riesgo, facultad que ahora se reserva para la Comisión Española contra la violencia en del deporte-.
También se encargaría en sus reuniones semanales de proponer las sanciones, entre otros, para el incumplimiento de las medidas de seguridad, al alteración del aforo del recinto, al apoyo a peñas o grupos que inciten a la violencia, las difusiones de contenidos o declaraciones violentas o con amenazas y la venta de productos prohibidos en el interior de un estadio.
Publicado por Que, 12/3/2009

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