Tu cuerpo sigue encerrado en una infame celda de pocos metros cuadrados, pero tu espíritu sigue volando libre. Ayer viste finalizar la San Silvestre como todos los años, en tu estadio y con tu gente. Y tu nombre sonó como nunca, a pesar de que quieran silenciarte a ti y silenciarnos a nosotros. En la última noche del año todo es posible, hay algo mágico en el ambiente cuando el primer corredor enfila por la bocana de Arroyo del Olivar y se elevan los estandartes, se estiran las bufandas, el humo decide aparecer y un coro seco, incesante, hipnótico...decide no ceder y rugir todavía más alto. Los aplausos al primer corredor, y al segundo, y al tercero, y al último, ayer no fueron sólo por los corredores. Amigo Alfon te queremos libre y lo queremos ahora, y no vamos a parar hasta lograrlo. Amigo Alfon, queremos a todos los presos políticos como tu libres y lo queremos ahora, y vamos a arrimar juntos el hombro para lograrlo. Ninguna radio, ningún periódico, ninguna televisión, van a decir lo que pasó el 31 de Diciembre del 2012 en Vallekas, 3 horas antes de que acabara el año, pero es que ninguno de ellos sabría transmitir ni la milesima parte de sentimientos que ayer fluyeron en tu estadio.
La próxima edición de la Sansil quiero que la escribas tú con tus palabras y que la veas tú con tus ojos y que la vivas tú con tu corazón, que ya también son nuestras palabras, nuestros ojos y nuestro corazón. Y quiero hacerlo a tu lado, ya sabes que los del barrio nos cuidamos las espaldas. Vas a salir a la calle y no vas a estar sólo, nunca vamos a estar sólos los que luchamos por un mundo mejor. Cada vez somos más los que estamos a este lado de la acera, nuestra acera, la acera rebelde y combativa del Valle del Kas.
Alfon, te estimamos. Alfon te queremos.
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