Incidentes en Pisa

Nove Firenze (Traducido por "La banda Izquierda")22/8/2010-. Incidentes entre seguidores del Pisa ayer en el Arena Garibaldi, los Ultras Curva Nord contra los espectadores de la tribuna, aunque mejor sería escribir 50 descontrolados contra gente normal que si probaba a decir cualquier cosa corría el riesgo de ser masacrada. Una fabula que acabó con personas por el suelo, una pancarta robada y una mujer inconsciente. Y hoy una ciudad triste por lo sucedido.

La foto no corresponde a este partido

Pero vayamos por órden y expliquemos el porque se llegó a esta situación ayer. Desde este año está en vigor la "Tessera del tifoso", para abonarse hay que suscribir también este carnet, repudiado por casi todos los fondos de Italia. Los porques son muchos, principalmente hay un punto que pone "nerviosos" a los ultras. Quién en los últimos 5 años haya tenido una sanción (Daspo), el procedimiento porque el que en un cierto periodo de tiempo una persona tiene prohibido el acceso al estadio, no puede abonarse y, de hecho, no puede realizar ningún viaje en el sector visitante, porque tal sitio sólo esta reservado para los poseedores de la "Tessera del tifoso". Y visto que los ultras "culpables" de Daspo en los últimos 5 años son tantos, esto origina malestar y muchos ultras exigen que ninguno se abone para contestar a este decreto que lleva la firma del ministro Maroni. En Pisa sólo se han abonado, por ahora, 2.500. Y esto es lo que llevo ayer a una caceria contra el "Tesserato".

 Los ultras del Pisa en ocasión del Pisa-Nocerina, partido inaugural de la Lega Pro, primera división, grupo B que terminó 1-1, comenzaron el partido entonando un "tesserato pezzo di merda". La tribuna comenzó a silbar y a cantar "Pisa, Pisa". Con el campo de batalla abierto, una parte de los ultras llegó a la red que separa el fondo de la tribuna para avisar que al final del partido, habría problemas. Y así sucedió. Apenas concluido el Pisa-Nocerina, unos 50 ultras se apostaron en la salida de la tribuna provocando y golpeando a quien osaba decirles algo.

 (El resto del artículo es una proclama anti-ultra, como lo ya traducido pero con más ahinco aún, que no nos apetece traducir)