Viene del capítulo 1
Al igual que el resto de firms de Escocia, los Hibs formaron alianzas con clubes ingleses. La primera de ellas fue con el Newcastle, ya en la primavera de 1987, 20 prefirieron ir al St. Jame´s Park al partido Newcastle-Leicester antes que ver como sus vecinos conseguían el título ligero. El Hearts sólo necesitaba un punto en su encuentro contra el Dundee y, en caso de no conseguirlo, sus más inmediatos perseguidores, el Celtic de Glasgow, necesitarían meter cinco goles en su partido. "Antes del partido los Hibs y algunos lads del Newcastle atacaron de frente a la multitud de aficionados del Leicester, resulta curioso que los que estuvieron en primera línea eran sobre todo los escoceses", recordó Strachan, "la gente mayor del Newcastle no estuvieron en la movida y no estaban muy contento con que los chicos del Hibs hubieran disfrutado de una acción más que ellos, pero los muchachos del Hibs se fueron bastante contentos".
"Durante el partido se corrió la voz de acontecimientos extraordinarios al norte de la frontera. Al Hearts le cayeron dos goles y el Celtic ganó su partido por cinco goles. Los gamberros del Hibs comenzaron a saltar y botar y a cantar "han perdido la liga, han perdido la liga, han perdido la liga", rompieron los respaldos de los asientos y los comenzaron a utilizar como platillos voladores. Los del Newcastle siguieron con el ejemplo y arrojaron asientos de plástico azul a través del aire y se unieron al cantico de "han perdido la liga, han perdido la liga, han perdido la liga". El Hearts perdió la liga y a los lads del Hibernian le comenzaron a gustar mucho los viajes a Inglaterra".
La relación no duro mucho. Un año más tarde hubo hostias a mansalva en el partido que enfrentó a Escocia contra Inglaterra, dando la casualidad que estuvieron implicados algunos supporters del Hibernian y del Newcastle. Desde entonces, la CCS comenzó una amistad con los Oldham´s Fine Young Casuals.
"En 1985 se celebró un torneo veraniego en la isla de Man, entre Oldham, Hibs, Stoke y Bury", dijo en un libro un veterano del Oldham llamado Carl Spiers. "Stoke tenía la mayor firm de chavales, seguido por los hibs, a continuación los del Oldham y los del Bury no tenían nada. Los de Oldham y los hibs pasaron todo el fin de semana juntos entre borracheras y los del Stoke se dedicaron a lo suyo, liarla. Los chicos de Oldham e Hibernian se intercambiaron direcciones y teléfonos y mantuvieron el contacto. Al año siguiente el Oldham y el Hibernian jugaron otro amistoso en Boundary Park, para aquel partido se había formado en el equipo inglés una pequeña mob de jóvenes casuals, de 16 y 17 años todos ellos. Tuvieron su primer y único error, ir a por los casuals del Hibernian tras el partido sin saber nada de la amistad que ya se había consolidado entre sus mayores y los escoceses. La CCS no tuvo muchos problemas en repeler el ataque y, obviamente, aquellos jóvenes que les atacaron no pudieron volver a aparecer por el estadio del Oldham. Algunos hibs pasaron la noche en Oldham y la amistad se mantuvo durante muchos años
Los muchachos de Oldham acudieron muchas veces a partidos en Escocia del hibernian, especialmente cuando jugaban contra el Hearts, Aberdeen, Celtic y Rangers, e igualmente los lads del Hibs acudían a ver los mejores partidos del Oldham contra el Leeds, Spurs, Villa, Man Utd y Man City. Pero quizás el mejor ejemplo de la conexión Oldham-Hibs fue cuando en 1994 el Oldham tuvo que jugar los cuartos de final de la FA Cup contra el Bolton.
Más de 100 ingleses acudieron al partido en tren y tuvieron algunos lios con la policía en la estación de Bolton. Muy pocos de los muchachos del Oldham tenían entrada para el partido y la policía los obligó a volver a la estación de Manchester. Cuando llegaron allí se dirigieron al pub de la firm del United y, por sorpresa, lo atacaron. En el interior había pocos chicos del Utd, pero le hecharon huevos aunque, obviamente y debido a la presencia numérica de ambos bandos, el resultado estaban decantado de ante mano. El bar quedó destrozado y supuso una importante victoria moral para los de Oldham. Entonces tuvieron una de las ideas más locas que ningún grupo de aficionados haya hecho nunca: secuestraron un bus de dos plantas en Manchester, obligaron a bajarse a los pasajeros y "convencieron" al conductor del mismo de que los llevase a Bolton sin parar y sin hacer caso de ningún control policial. Así que con el partido ya empezado consiguieron llegar, por fin, al centro de la ciudad de Bolton, permanecieron hasta que terminó el partido y fueron en busca de la firm local. Hubo una buena pelea en la que, una vez más, buena parte de la primera línea estaba compuesta por chicos del Hibernian. A las 6:30 de la tarde la policía los volvió a expulsar de la ciudad, pero el daño ya estaba hecho para entonces.
En agosto de 1990, un lumbreras tuvo la feliz idea de organizar un partido amistoso del equipo en...Millwall, la sola pronunciación de ese nombre se asociaba a la violencia. La CCS estaba en su apogeo y sus miembros esperaron ese choque con muchísimas ganas. Casí 200 hibs se reunieron en la tarde-noche de un jueves para acudir a Londres en distintos autobuses, con el fin de evitar el control policial. En aquel viaje estaba la creme de la creme del hooliganismo escocés, cuyo peligro aumentó por el consumo desenfrenado de alcohol y drogas en dicho viaje. Desafortunadamente para ellos, la policía se había enterado de sus planes y esperó pacientemente a los hooligans escoceses en la estación de autobus. Frustados pero inasequibles al desaliento, decenas de ellos optaron por medios alternativos de transporte. Algunos tomaron el tren, otros autobuses a otras ciudades donde luego harían escala para coger alguno a Londres, algunos incluso llegaron a coger el avión. No importaba como ni de que manera, pero tenían que estar presentes, y en buen número, en el barrio londinense.
Finalmente de los 200 iniciales, juntaron en Londres varias horas después a un buen grupo de 90 casuals que emprendieron a pie el viaje a Millwall. Cuando enfilaron la Old Kent Road comenzaron a cantar algo así como "Creimos que era díficil, pero estuvimos equivocados" y "la familia hibees". Después atacaron el pub del Millwall, pocos lads del Millwall aguantaron fuera del mismo, el resto se refugió dentro, los cristales de las ventanas volaron y un coche fue volcado en los disturbios. Más cerca del estadio, otro grupo de 25 hibs (que habían llegado un poco más tarde) se liaron a hostia limpia con otro grupo de igual número de hooligans del Milwall.
Los del Millwall estaban furiosos aquel día, les habían atacado desde dos lugares distintos y se encontraban un tanto desconcertados porque no tenían costumbre de ser atacados, sino de atacar ellos primero. Intentaron un pequeño escarceo tras el partido contra los 300 seguidores del Hibernian desplazados (hooligans y supporters normales) que, obviamente, ya salían con la escolta policial. Pero sólo se quedó en unas pequeñas correrías por las calles anexas y poco más. Aquella fue una de las mejores noches de la CCS, el día había sido largo y muy caro, pero la relación calidad-precio les pareció muy buena, viendo el resultado obtenido.
Continuará...
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