viernes, 31 de julio de 2009
Welcome to the football business
Estados Unidos ha sido, está siendo, el país elegido por los grandes clubs de fútbol mundial para abrir sus mercados estratégicos de negocio. Y qué mejor manera que enviando a sus equipos, con sus respectivas estrellas, a la vez que promocionan el ‘soccer’, un deporte que cada día tiene más adeptos.
Esta temporada han estado jugando en tierras americanas Chelsea, Inter y Milan. Y ahora lo hará el Barça. De todos ellos, el que obtiene mejor rentabilidad económica es el FC Barcelona merced al ventajoso contrato que hace dos años firmaron en Nueva York Ferran Soriano y Jaume Ferrer. Un acuerdo que se ha revisado al alza este año después de la obtención del triplete por parte del equipo de Guardiola.
La entidad azulgrana llegó a un acierto global con la Major League Soccer, que tiene todos los derechos sobre la liga de fútbol americana a través de su empresa SUM (Soccer United Marketing). Esta controla el merchadising, los derechos de televisión y la venta de entradas, entre otros temas.
La firma entre el FC Barcelona y la MLS contemplaba la presencia del primer equipo del Barça en Estados Unidos en tres ocasiones en los cinco años siguientes al acuerdo, alcanzado en 2007. Dado que ya estuvo en año pasado y en el actual, hasta 2011 el conjunto azulgrana habría cumplido con ese requisito viajando a EE.UU. una vez más.
Lo que diferencia la gira de este año con la de la temporada pasada es el ‘caché’ del FC Barcelona. El club azulgrana logró de la MLS un incremento sustancial del fijo teniendo en cuenta que era el campeón de Europa. Del millón largo de euros que estaba estipulado por partido, se ha pasado a los 1,8 millones de euros por encuentro. Los pupilos de Pep Guardiola jugarán tres amistosos, en Los Angeles, Seattle y San Francisco, por lo que van a generar un total de 5,4 millones de euros.
Esto, sin embargo, no es todo. La MLS y el Barça han creado una cuenta de explotación en la que van a parar todos los ingresos y por todos los conceptos (entradas, derechos de televisión, merchandising, etcétera). También los gastos. Una vez descontados esos gastos de los ingresos se generan unos beneficios. De ese neto, al FC Barcelona va a parar el 75% y el 25% a la MLS.
Si el año pasado la afluencia de público a los partidos que jugó el Barça no fue todo lo bien que se esperaba, esta temporada la situación se ha revertido. En Seattle (Sounder-Barça) no queda una sola entrada. Todo está vendido en un estadio de 67.000 espectadores. En Los Angeles, donde el sábado se medirá al equipo de Beckham, ya se han venido 70.000 entradas sobre 91.000 localidades y en San Francisco (Chivas-Barça) la relación es 40.000 tickets sobre 66.000 asientos. Por lo tanto, la ganancia para el Barça está asegurada.
Ahora lo que quiere el club, además de fortalecer su imagen de entidad solidaria a través de su alianza con UNICEF, es tener presencia fija en Estados Unidos y ya está trabajando en la creación de diversas escuelas en ambas costas, la oeste y el este. Escuelas de fútbol del Barça donde prevalezca una forma de jugar. Una seña de identidad.
Publicado en el Sport, 31/7/2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario