El propietario del Steatua de Bucarest, Gigi Becali, ha sido condenado este lunes a tres años de cárcel por haber ordenado en 2009 el secuestro de tres personas que habían robado su coche. La aplicación de la sentencia de la Alta Corte de Casación y Justicia se dejará en suspenso y sólo se aplicará si es condenado por otro delito.
En cualquier caso, el también diputado del Partido Nacional Liberal tendrá que presentarse ante la Policía una vez al mes e informar de sus viajes al extranjero. "Pierde Rumanía. Ya no tengo nada más que hacer allí, no vuelvo a pisar ese país", declaró Becali a la emisora Romania TV tras conocer la sentencia en Dubai.
"Rumanía no es un lugar seguro; me da vergüenza regresar allí", precisó quien pasara de ser un humilde pastor a un multimillonario gracias a negocios inmobiliarios en los años posteriores a la caída del comunismo.
En enero de 2009 Becali ordenó a sus guardaespaldas que localizaran a los ladrones de uno de sus vehículos de lujo. Tres hombres fueron secuestrados durante tres horas, en las que el patrón del Steaua se reunió con ellos y les exigió que le devolvieran el coche.
FUENTE: MARCA
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