Un centenar de ultras atalantinos, a pesar de la prohibición del viaje por parte de los estamentos pertinentes, se recorrieron buena parte de "la bota" italiana para asistir al partido que enfrentaba a su equipo frente al Cagliari. Todos ellos provistos de su entrada para el partido. Los ultras atalantinos, que guardan buena relación con los seguidores locales, obtuvieron sus entradas por medio de sus colegas del Cagliari, entradas autorizadas por la comisaría local y compradas entre semana para acceder a la Curva Sud del estadio sardo.
Ayer, entorno a las 14:30, se juntaron para ir al Sant´Elia. Una treintena de ellos, sin problemas, pudieron acceder al interior del estadio, forzando a la entrada el acento propio de la localidad. Los restantes 70 fueron retenidos por las fuerzas del órden presentes, que impedieron su ingreso a pesar de tener la entrada correspondiente.
Para los treinta supporters ya comodamente ubicados en la Curva Sud, que pensaban que podían presenciar el partido, la última sopresa estaba por llegar: las fuerzas del órden, de hecho, los arrinconaron en el estadio y los alejaron del mismo. A destacar que no hubo desórdenes ni antes, durante ni después del encuentro.
Publicado en "Il nuevo giornale di Bergamo", 9/2/2009
Traducción: La Banda Izquierda
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